¿Te acuerdas de Pandora? Lecciones de negocio de lo que fue el precursor de Spotify hace 10 años
Las recomendaciones de canciones según tu gusto musical son algo normal en tu vida, pero antes de la creación de Spotify ya había habido empresas que habían intentado construir sistemas de recomendación musical como Launchcast adquirida por Yahoo. Pandora fue el primer gran éxito de la recomendación musical creada por Tim Westergren y Jon Kraft.
En su momento, el servicio de transmisión de música tuvo una valoración de 8 mil millones de dólares y Westergren fue nombrada una de las 100 personas más influyentes de 2010 por la revista Time. Pandora salió a Bolsa en 2011 y se vendió por 3,5 mil millones de dólares en acciones a Sirius Radio. Pero el camino fue muy duro y las lecciones se aprenden de los momentos mas críticos. La historia de Pandora y su CEO en titulares:
De universitario a vivir 7 años en la carretera con una banda de rock: Después de graduarse en Stanford, pasó siete u ocho años viviendo en una camioneta. Tim lo define como «ser parte de un mar de músicos talentosos, pero completamente invisibles». Es la etapa donde construye su gusto musical y la pasión por la música.
En plena burbuja punto com consigue financiación para crear una empresa tecnológica centrada en la música: En 1999, en la cúspide del boom de las punto com, crea una compañía con su amigo con Jon Kraft quien ya había construido y vendido una empresa. Con un plan de negocios construido en un fin de semana consiguieron 1,5 millones de dólares.
Un ADN musical: La categorización de todas las canciones. La piedra angular de la idea fue lo que llegó a llamarse Music Genome Project, que era una taxonomía enorme para categorizar cualquier canción. El Genoma musical es una lista de 450 atributos que captura cada detalle infinitesimal de melodía, armonía, ritmo, forma, instrumentación, voz, etc.
La creación de producto inicial más manual que puedas pensar:
Contrataron a tres docenas de músicos para que vinieran, escucharan las canciones una a una y las analizaran manualmente, atributo por atributo. Tuvieron alrededor de 75 músicos escribiendo sus pensamientos, y después transfirieron esos datos a Excel.
Contrataron a un grupo de informáticos para que adjuntaran un algoritmo que pudiera usar la información para conectar canciones en función de su proximidad musical. Un año después de este proyecto, habían analizado alrededor de 10.000 canciones.
El modelo que comparaba canciones era una macro en Excel que creo el CTO, Will Glaser. La idea era comparar todas las canciones en base a la «distancia» de sus atributos. Después, la macro ordenaría por rango estas 10.000 canciones por proximidad musical a la canción elegida.
Los primeros resultados a primera vista no tenían sentido pero abrieron lo que ahora conocemos como recomendación de canciones: En palabras de su fundador «Escribimos una canción de los Beatles y esperamos tres o cuatro minutos para que la macro hiciera su cálculo. Finalmente escupió una lista y la primera canción era de Bee Gees, oh, mierda. Pero escuché la pista y era increíblemente similar a la canción de los Beatles que habíamos introducido. Resultó ser una canción de los primeros años de Bee Gees, en un momento en que eran más o menos una imitación de los Beatles. Entonces, el proyecto había encontrado la combinación perfecta entre estas 10.000 canciones. Pasamos de la desesperación al júbilo en cuestión de minutos.»
Durante dos años no pagaron nóminas y después de 348 rechazos consiguieron más financiación: Cerca de 50 personas trabajaron sin salario durante más de dos años para mantener la empresa a flote. Después de haber presentado Pandora 348 veces consiguieron más inversión para seguir creciendo. En marzo de 2004, anunciaron una ronda de financiación de 9 millones de dólares.
Servicio freemium y abierto a todo el mundo
o al menos en EE.UU: En noviembre de 2005, crearon un prototipo con algunos amigos y familiares, y luego lo lanzaron como un servicio de transmisión gratuito y completo al público un mes después. El CEO recuerda que inicialmente no estaba disponible fuera de EE.UU…
El éxito fue instantáneo: Pasaron de una situación de pesadilla a ser la nueva tendencia digital en cuestión de meses. La plantilla creció de 50 a 1.700 personas, repartidas entre 50 oficinas en tres países alrededor del mundo.
Así que detrás de cada éxito mundial siempre hay una historia larga de trabajo y en algunos casos de sufrimiento, como Pinterest o Airbnb.
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