SNAP y Zenly: Ni como la berza ni la dejo comer
El inicio de esta historia: En 2017 Snap compra Zenly, una startup creada en 2011 que quería crear una red social «sobre los mapas. En 2016, un año antes, la empresa había levantado 33 millones de dólares de inversores de primera magnitud como Benchmark. Snap no quiso contaminar su crecimiento y dejó la empresa tomar decisiones de manera independiente durante 5 años.
Un crecimiento envidiable: En 2017 la aplicación tenía menos de 150.000 usuarios activos al día, mientras que este año 2022 había llegado a tener 40 millones cada día.
Viento a favor: En Abril de este año, Evan Spiegel, CEO de Snap, dice a los empleados de Zenly: “Creo que la escala de Zenly hoy exige más apoyo de la organización (Snap) a medida que ingresamos a la siguiente fase del crecimiento de Zenly en todo el mundo”,
El fatal desenlace: 5 meses después Snap anuncia que cierra la aplicación.
Las crudas conclusiones:
Snap no se ve capaz de hacer que la aplicación genere ingresos. Si Google maps y waze están haciendo ingresos de publicidad porque no los puedes hacer con Zenly
No quiere venderla (por mucho más de lo que la compró) para NO TENER UN COMPETIDOR EN EL FUTURO.
Hace unas semanas analicé también a Snap por la manera en la que había priorizado los recortes en productos y personas. Espero que en su unidad de negocio principal, la toma de decisiones sea diferente y que realmente sea un tema de priorizar dónde pongo cada euro de la compañía.
Pero desde fuera solo veo miedo en Snap, miedo ano saber hacerlo bien y perder dinero, miedo a vender y perder su posición (6º o 7º) en mercado de publi.
No hay peor cosa que el miedo en la toma de decisiones porque te lleva a la inacción.