Panorámica semanal: China toma el control de su economía digital
China está tomando medidas profundas para controlar su economía digital. Pero ¿se trata de limitar el poder abusivo del mercado o es una cuestión política? De hecho, según el WSJ, podría haber un poco de ambos elementos. Sí, las grandes tecnológicas chinas dominan la publicidad online en el país, y también representan cerca de la mitad de las inversiones de capital riesgo, con las que pueden protegerse contra posibles amenazas procedentes de nuevas startups. Las Big Tech chinas también han forzado el uso de políticas de «exclusividad» para terceros que utilizan sus plataformas, en detrimento de la competencia. Todo esto podría justificar las acciones regulatorias. Pero también hay indicios de que la economía digital china está lejos de ser un monopolio, e incluso ha habido casos recientes de startups locales que han crecido hasta competir directamente contra los incumbentes, como ByteDance y sus exitosas aplicaciones, Douyin y Toutiao. Así que, a fin de cuentas, el reciente «Techlash» parece justificado en gran medida por la necesidad del gobierno de limitar el creciente poder que estaban adquiriendo gigantes de Internet como Alibaba y Tencent. En particular, en el espacio de las fintech hay un elemento de protección a los grandes bancos estatales, que han ido perdiendo poder. El problema es que estas empresas tienen mala reputación entre los consumidores chinos. Y la exigencia sobre las fintech para que compartan sus datos con estos bancos “legacy» también podría desincentivar la inversión en capturar y analizar de los datos de los consumidores, en detrimento de la calidad del servicio (WSJ)
La competencia entre las grandes empresas chinas de tecnología va en aumento, lo que cuestiona la necesidad de la regulación: ByteDance ha captado una parte importante de la atención de los internautas chinos, principalmente a través de sus dos principales aplicaciones: Toutiao (un feed de noticias) y Douyin (el TikTok chino). Y ahora quieren aprovechar esa posición para ganar cuota de mercado en otros negocios, como el de los juegos, hasta ahora dominado por otros actores, Tencent en particular. ByteDance ha adquirido recientemente dos empresas de juegos, Moonton y C4-Games, y quiere utilizar su gran base de usuarios, que pasan mucho tiempo con sus aplicaciones, para promocionar sus juegos y quitarle cuota a Tencent, que hoy controla más de la mitad del mercado chino de juegos para móviles. Esto se ve como un ejemplo de cómo ya hay competencia en la Internet china, y como un argumento contra las acusaciones de abuso de poder por parte de Tencent o Alibaba, que se supone que justifican las regulaciones del gobierno (WSJ)
Paradójicamente, esta intensidad competitiva podría contribuir a desplazar el poder hacia el gobierno: El New York Times afirma que la competencia entre las empresas chinas de Internet podría dar más poder al gobierno chino, ya que las empresas intentan que sus rivales queden mal ante los ojos de los reguladores, en lugar de corregir sus propios comportamientos anticompetitivos. Así que esto podría generar una competencia entre todas ellas por complacer al gobierno. El artículo también ofrece algunas estadísticas interesantes sobre el mercado chino, que indican que Tencent es un inversor estratégico en 4 de las 10 principales aplicaciones, Alibaba controla 3 de ellas, Baidu controla 2 y ByteDance es propietaria de la que queda (Douyin) (NYTimes)
En particular, el mercado chino de fintech no volverá a ser el mismo: El jueves pasado, el Banco Central de China y otros cuatro organismos reguladores comunicaron a Tencent, Didi Chuxing y JD.com que debían desvincular su oferta de servicios financieros de sus aplicaciones. El motivo parece ser que los pagos, parte central de las apps de estas empresas, proporcionan información valiosa sobre el perfil financiero de las personas, así que los datos sobre transacciones pueden utilizarse para obtener una ventaja competitiva de cara vender préstamos y otros productos financieros. Como consecuencia, el gobierno quiere desvincular los servicios financieros y los pagos, y «abrir» los datos sobre las transacciones a cualquier proveedor de productos financieros. Esto es básicamente ampliar una restricción que ya se había impuesto a Ant Group, que había construido un popular servicio de «microcréditos» que utilizaba los datos de las transacciones con Alipay, su servicio de pagos. Este binomio entre datos y servicios ha generado un enorme crecimiento para el sector, y hay muchas incertidumbres sobre lo que va a ocurrir ahora (WSJ)
La valoración de Ant Group podría haber cambiado drásticamente debido a esto: Según un análisis de Bloomberg Intelligence, la valoración de Ant Group podría haber descendido hasta 29.000 millones de dólares, en el peor de los casos, basándose en el valor de mercado de bancos e instituciones financieras convencionales. Esto equivale a una erosión de casi 300.000 millones de dólares frente a la valoración prevista en la OPV que no se produjo el año pasado, que apuntaba a una capitalización de mercado de 320.000 millones de dólares. ¿La razón? Las mismas restricciones que el gobierno chino está extendiendo ahora al resto de las empresas fintech. Así que esto tiene pinta de ser un tema importante… (Bloomberg)
Tencent y Meituan aparecen ahora «oficialmente» en el radar: Aparte de las empresas de fintech, muchas otras grandes empresas de Internet chinas están también en el punto de mira del gobierno. En primer lugar, Tencent, también bajo presión por su exposición a los pagos y servicios financieros, se enfrenta a una multa de al menos 1.600 millones de dólares por comportamiento anticompetitivo con su aplicación de streaming de música. Se trata de un mercado que Tencent domina, pero en el que la posición de la empresa se ha debilitado recientemente, con un acuerdo entre NetEase (otro actor chino de Internet) y Universal Music. Paralelamente, Meituan, la tercera empresa china de Internet más valiosa, por detrás de Alibaba y Tencent, con una capitalización bursátil de más de 200.000 millones de dólares, también está siendo investigada por «presuntos comportamientos monopolísticos». Meituan es líder en el sector de los supermercados online, y distribuye productos de diferentes comerciantes, a los que (aparentemente) se obliga a aceptar un acuerdo de exclusividad, que les impide utilizar otros canales de distribución.. Esta misma ha sido una de las acusaciones que han llevado a la reciente multa de 2.800 millones de dólares a Alibaba (Bloomberg)(WSJ)
Huawei, perjudicada por las prohibiciones occidentales y relativamente inmune a la regulación local, podría emerger como «el Microsoft chino«: Huawei está en un proceso de reinvención. Esto quedó claro en los recientes resultados de la empresa, que mostraron un descenso de las ventas del -17% (hasta 23.000 millones de dólares/trimestre). Básicamente, la empresa se ha visto obligada a abandonar el mercado de los smartphones, y ahora se centra en su negocio (principal) de equipos de red, con productos 5G para China y otros mercados «amigos», y en diversificar hacia nuevos negocios. Para ello, la compañía dice que está aumentando su inversión en I+D, que se dedicará en parte al desarrollo de coches eléctricos de conducción autónoma. Obviamente, el gobierno está tratando de ayudar, por lo que Huawei podría convertirse en una especie de «Microsoft china», con un gran tamaño que le permite competir cara a cara con otros «Gigantes», pero al mismo tiempo con una presión regulatoria (interna) relativamente baja (Bloomberg)