El mercado se contrae… ¡Market crunch!
La semana pasada ha sido inquietante en los mercados financieros globales, y no sólo porque el mercado de valores ha caído poniendo fin a una década de crecimiento.
Acciones caen … pero los bonos también: Los precios de los bonos y los precios de las acciones se han movido juntos, pero no en direcciones opuestas como suelen hacerlo.
No hay valores seguros: El miércoles de la semana pasada los valores refugio como el oro caían cuando deberían subir dado el batacazo bursátil.
Se congelaba la compra-venta incluso de los activos más líquidos: No solo para los bonos de las empresas que sufrían un frenazo en el número de transacciones, sino también en los bonos del tesoro que son la base del sistema financiero global.
Esta situación es un «outlier»: Si las acciones bajan, los bonos suelen subir y viceversa. Es por eso que fue extraño que el miércoles y jueves, ya que el S&P 500 bajó ¡un 14 por ciento!, mientras que el rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años apenas incrementó 0.10 puntos porcentuales.
¿Falta de liquidez? La reserva federal anunció la inyección de 1.5 Billones (millón de millones) de dólares pero la tensión en los mercados no se disipó.
Los analistas atisban un «cash crunch» donde la liquidez disponible se reduce drásticamente de ahí que la demanda y las transacciones bajen y por tanto los valores refugio también caen.